viernes, 7 de agosto de 2009

La mujer en la copla

Me encanta la copla, de hecho soy una enamorada de ella. Fanática de Doña Concha, admiradora de mi paisano Carlos Cano y "escuchadora" de todas aquellas que, con un poco de calidad y buen gusto, se me pongan delante.
La copla expresa sentimientos exacerbados sobre el amor, el desamor, la pasión,...siempre desde un óptica increiblemente machista al igual que el bolero. Responde a la expresión de los sentimientos y la realidad en unas épocas determinadas y por tanto quedan descontextualizadas totalmente de la nuestra, hay que tomarlas como parte del folclore y ejemplo del papel que representaba la mujer entonces.
En la copla se refleja a dos prototipos de mujer: la mujer víctima, sufrida, la sometida en silencio; por otra parte la mujer mala, de esas que fuman, beben y aman apasionadamente.
La Lirio es una de ellas, una niña a la que la Bizcocha (proxeneta) tiene en un café de marineros (prostíbulo) y se la vende a un cubano por 50 monedas de oro (posible pederasta). ¡Telita con el tema! porque o es eso o yo tengo una mente muy retorcida.
Tenemos también a Lola Puñales, una devorahombres que cantaba y bebía o a Trini, la Parrala, a la que "las claritas del día siempre le daban bebiendo".
En la copla siempre está presente el desamor, el destino como algo previamente escrito y difícil de modificar. A veces la mujer pierde su identidad (Yo soy esa)"lo mismo me llaman Carmen que Lolilla que Pilar, con lo que quieran llamarme me tengo que conformar..." es "la que no tiene nombre, ...la perdición de los hombres" "y yo que mintiendo me gano la vida........" De este modo la mujer no sabe ni quién es, supeditada siempre al hombre "no me llames Dolores, llámame Lola, que ese nombre en tus labios sabe a amapola"
Otra mujer interesada a la que una marqués llenó de brillantes de la cabeza a los pies, mujer de hielo que se burlaba de los hombres, la Zarzamora que despreciaba a los hombres hasta que se va a enamorar de un casado.
También está Triniá, mujer con una apariencia semejante a la de la Virgen Santísima pero con algo en la mirada que hace presentir que no es buena y que se deja seducir por el brillo de las joyas de un banquero americano con el que se marcha, dejando a otro "hecho un desgraciao"
Siempre provocadoras "pasaban los hombres y yo sonreía" se deja seducir por un hombre de ojos verdes que, en pago por sus servicios, "pa un vestío" le quiere regalar pero tal ha debido ser la noche de pasión que ella no lo acepta "yo te dije estás cumplío, no me tienes que dar na" ¡Contenta la dejaría!
El maltrato también está presente en la copla "cruzó los brazos pa no matarla" "temió ser débil y perdonarla" El perdón como símbolo de debilidad, quizá matarla hubiese sido más de hombre, es por eso que la maldice para que sea como la falsa monea "que de mano en mano va y ninguno se la quea" evidenciando el escaso de valor de una mujer que no pertenece a ningún hombre.
La mujer se deja comprar y es siempre bien pagá por un hombre que la cree de su propiedad. Es una mujer que por amor se deja humillar y que incluso está dispuesta a morir " que se me paren los pulsos si te dejo de querer, que las campanas me doblen si te falto alguna vez" ella soporta las infidelidades, soporta que no reconozca al hijo que han tenido entre ambos, a pesar de ello ella asegura que "sin embargo te quiero"
Otra pobre mujer es la que se queda a la lima y al limón, soltera y sola porque no tiene quien la quiera a los 30 años, "sólo el viento, de noche, es quien le ronda la calle" pero ella "nunca pierde la esperanza" aunque "se han casado sus amigas, se han casado sus hermanas...". Mientras, el tiempo pasa factura a su belleza. Finalmente logra casarse y dar con ello una bofetada simbólica a todos.
Si conocéis las coplas o pincháis los enlaces quizá observéis lo mismo que yo. A pesar de que estos estereotipos sobre la mujer están mal vistos socialmente siguen existiendo, si no de qué hay todavía tantos hombres que creen que las mujeres son de su propiedad y hacen verdad aquello de "la maté porque era mía y ella sola se murió".
Aunque sea capaz de ver todo lo expuesto anteriormente, me gusta la copla y seguiré escuchándola y cantándola mientras hago las camas y limpio el polvo como si llevase un gran vestido de cola y agitase sus volantes cuando me giro a limpiar la estantería..
Otro día quizá me anime a ver cuál es el prototipo de hombre en la copla, que ellos quedan siempre muy bien retrataos, muy hombres y si son infieles es, siempre, por su hombría, mientras que ellas lo son porque son MALAS. De todos modos, me da a mí el pálpito de que el hombre en la copla es un hombre inseguro y dependiente emocionalmente de la mujer que es, en definitiva, la causa de todos sus males. Tanto que, a veces, esos hombres cabales donde los haya, como Antonio Vargas Heredia, sean capaces incluso de matar. Claro está, por ellas ("pero por culpita de una hembra gitana, su faca en el pecho de un hombre se hundió, los celos malditos tuvieron la culpa y preso en la trena de rabia lloró)

Publicado en http://carmenxubcn.spaces.live.com hace un par de años

2 comentarios:

  1. Mis deditos de pulsar estas teclas por verla vestida de Carme-n (la de Merimè) mientras quita el polvo (con perdón) de la cómoda y atiende a la olla (otro perdón) hirviendo, y salen las coplas por las ventanas abiertas...

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